Buenas noticias. En tiempos como los que corren, se agradecen iniciativas que defiendan un nuevo modelo de turismo más sostenible. Y si las iniciativas en cuestión vienen de instituciones relevantes como el Comité español del Consejo Internacional de Museos (ICOM) o la Federación Española de Amigos de los Museos (FEAM), respaldados por otros como la Organización Mundial del Turismo o Turespaña, pues mejor que mejor. Todos han presentado ayer en Madrid la Declaración en pro de un Turismo Cultural Sostenible con la que pretenden sensibilizar de los riesgos de una «inadecuada gestión del turismo» sobre la conservación del patrimonio cultural. La propuesta culminará con la elaboración en los próximos meses de un decálogo de buenas prácticas para turistas e instituciones, bajo el lema «disfrutar sin destruir».
La actividad turística se ve todavía hoy como una amenaza integral para el patrimonio cultural, cuando a poco que se gestione correctamente debería ser su principal aliado y fuente de su desarrollo y mantenimiento. Para ello es imprescindible que la gestión cultural y turística vayan de la mano y se eduque al turista para que se cambien determinadas actitudes. Para alcanzar estos objetivos, la presidenta de la FEAM, Ana Luisa Delclaux, consideró que los museos deben dirigirse a los turistas de una forma «mucho más directa de lo que han hecho hasta ahora», así como promover las mejores conductas entre sus visitantes y contribuir a su conocimiento haciendo «un turismo más compatible con el entorno».
De esta forma, frente a una masificación de los viajes se quiere recuperar la concepción del viajero que se adapta al entorno. Igualmente, se insta a los viajeros a que se informen de cómo el turismo masivo puede desembocar en una «turistificación» de las sociedades. Esto significa que hay que ser conscientes de las repercusiones económicas y la amenaza que ciertas actitudes pueden suponer para la ordenación de un territorio y la naturaleza de los lugares que visitan.
Sin duda, un primer paso para educar al turista y crear conciencia de que es necesario un cambio hacia un modelo económicamente viable, socialmente beneficioso, culturalmente responsable y que acabe con las desigualdades, en lugar de incrementarlas. Estaremos atentos al decálogo de buenas prácticas que saldrá a la luz próximamente y, mientras tanto, os dejamos con la declaración completa en pro de un turismo cultural sostenible.
DECLARACIÓN EN PRO DE UN TURISMO CULTURAL SOSTENIBLE
[…] “Disfrutar sin destruir” en pro de un turismo cultural sostenible […]
[…] Ya hemos hablado en Ecotumismo de las iniciativas de la FEAM, que presentó en el pasado mes de noviembre una Declaración en pro de un Turismo Cultural Sostenible, con la que pretenden sensibilizar de los riesgos de una “inadecuada gestión del turismo” sobre la conservación del patrimonio cultural. La propuesta culminó con la elaboración de un decálogo de buenas prácticas para turistas e instituciones, bajo el lema “disfrutar sin destruir”. […]