¿Cuántas veces ha sonado el despertador por la mañana y has deseado poder quedarte durmiendo en la cama? ¿Eres de los que disfruta entre sábanas durante horas y horas? La mayoría de nosotros podríamos contestar que si, pero hoy os traemos una iniciativa que puede que sea el sueño, nunca mejor dicho, de todos nosotros. Hace trece días, Iván Martín y Camy Lázaro se tumbaron en la cama de un piso céntrico de Madrid para permanecer durante 40 días sobre ella. Poco imaginaba Carlo Petrini allá por los años 80 cuando inició el movimiento Slow que dos jovenes seguidores se encerrarían durante 40 días y 40 noches para reivindicar los valores de su filosofía. Martín y Lázaro pretenden que la gente pare y frene su ritmo de vida. La filosofía Slow busca retomar tiempos antiguos, cuando se vivía más lento, por lo que Iván Martín, diseñador industrial especializado en ecodiseño, y Camy Lázaro, psicóloga y profesora de yoga, han decidido encamarse y llevarlo a la práctica en directo, a través de la web 40 días en la cama y las redes sociales. Reivindican una vida sin estrés y la importancia de desacelerar el ritmo poniendo más conciencia en cada uno de nuestros actos.
Durante estos 40 días recibirán visitas de expertos en el mundo slow y alternativo con los que charlarán y compartirán experiencias en su blog. Cada día lo dedicarán a un tema diferente: viajes, belleza, educación, música, moda o gastronomía, y de momento ya han tratado sobre yoga, relacionarse con los demás de forma más sana, cooperativas de consumo o agricultura ecológica.“Queremos conversar con quien nos vea y, de esta forma, conseguir que la gente conozca a fondo el movimiento Slow, mostrándoles las ventajas que pueden lograr marcando su propio ritmo a su vida, en lugar de dejarse llevar por el ritmo que el trabajo, las modas o la sociedad imponen”, dice Iván Martín.
SU MANIFIESTO POR UNA VIDA SLOW
- A todos aquellos que nos hacéis vivir con prisa. ¡Resistiremos!
- Cuando todos pierdan la cabeza en la hiperactividad y el estrés, caminaremos despacio y confiados. Defenderemos a cualquier precio nuestro derecho a la tranquilidad.
- Iremos slow en el trabajo, en las tiendas y en el coche. Slow por las calles y los campos, cuesta arriba y cuesta abajo. ¡Nunca nos rendiremos!
- Si eres capaz de ir slow cuando a tu alrededor todos aceleran, entonces eres uno de nosotros, aunque todavía no lo sepas.
- Si algo merece hacerse… merece hacerse slow. Si algo te hace feliz, saboréalo.
- Incluso el paisaje más hermoso, se convierte en una mancha ante tus ojos por efecto de la velocidad. Cuando te detienes, de repente todo se aclara.
- Algunos han nacido para acelerar a los demás. ¡Aléjate de ellos!. Otros creemos que tumbarse en la cama por la mañana un zumo recién exprimido mientras un rayo de sol se desliza sobre las sábanas… ¡es lo máximo a lo que puede aspirar un ser humano!
La iniciativa se realiza gracias al patrocinio de la marca Flex, todo sea dicho, aunque al menos en este caso la acción ayuda a divulgar filosofías de vida más naturales, sostenibles y enriquecedoras.
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18 Nov 2013 - Slow Life, Turismo, Turismo responsable, Turismo sostenible, Viajes