Mucha gente, a la hora de plantearse si montar un huerto urbano en su casa o en algún elemento común del edificio donde habita, se encuentra con un problema a veces insuperable: el espacio. La falta de un lugar adecuado, no sólo por tamaño sino por falta de buenas condiciones atmosféricas de sol, temperatura o humedad hacen que se termine por abortar misión. Los huertos verticales suelen ser una solución intermedia apta para muchos balcones o ventanales pequeños o estrechos pero, sin duda, hay una alternativa que cualquiera, tenga el espacio que tenga o con las peores condiciones de luz posibles, puede desarrollar si quiere en su casa: los germinados ecológicos. Seguramente todos hemos puesto en práctica esta sencilla fórmula para obtener alimentos sanos y extremadamente nutritivos. ¿Os suena el experimento con el recipiente de yogurt vacío, un algodón mojado y una lenteja que a todos nos enseñan en el colegio? Pues básicamente, la técnica ya la sabes y para los más escépticos, vaya por delante que hablamos del alimento vivo más antiguo del planeta. Y esto de que está vivo es, precisamente, parte fundamental de su valor, porque mantiene todas sus propiedades nutritivas y organolépticas intactas. Los germinados son un manantial de clorofila, enzimas y vitaminas, muy indicado en cualquier tipo de alimentación. Se cuecen muy rápido o se comen directamente crudos y también son un alimento predigerido, por lo que son muy adecuados para estómagos delicados. ¿Te apuntas al carro del cultivo urbano de alimentos?
La clave de todo radica en la semilla, que tiene como estructura básica el germen o embrión y una reserva nutritiva que lo alimentará para que se convierta en la futura planta, todo ello recubierto de una envoltura protectora que es la cáscara o tegumentos. Esta reserva nutritiva consiste en proteínas, carbohidratos, vitaminas y sales minerales. Casi cualquier semilla, grano o legumbre, puede germinarse, incluso semillas que no forman parte de nuestra alimentación como la del rábano, la alfalfa, el nabo o la col. El sabor de los germinados es variable, el de alfalfa es uno de los más agradables y en cambio el del rábano es muy picante. Son un complemento perfecto para ensaladas y revueltos y como una imagen vale más que mil palabras, aquí os dejamos todos los pasos necesarios para preparar, sembrar y mantener vuestros germinados en la cocina de vuestra casa. Por supuesto, agradecer una vez más a Manel Font de Ecohortus por su ayuda y por enseñarme todo proceso para tener germinados en caa:
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Felicidades por el articulo:
Precisamente Partir del proximo mes de Junio Ecohortus iniciara una campaña de venta y promocion de Semillas ecologicas para germinar asi como un germinador muy economico e ideal para los que quieran adentrarse en el mundo del germinado o de los brotes.
Estimados amigos en la red: Estoy imaginando (sin mala intención) que si se sigue este plan, no alcanzaría la producción de semillas de todo el mundo,ni para una ciudad. Yo creo que lo mejor es hacer producir frutos,semillas, hojas etc.con hidroponía y especialmente aeroponia para las papas. Piensen en FVH para formar carne. Otro consejo aún;Pueden elaborar BIOL como nutrientes principales.(cuidado con los gases)para utilizar poco de abonos químicos. Saludos de henry.